SECUOYA

 

Nombre común: Secuoya
Nombre científico: Sequoia sempervirens Endl.
División: Pinophyta
Clase: Pinatae
Subclase: Pinopsida
Orden: Pinales
Familia: Cupressaceae
Subfamilia: Sequoioideae
Género: Sequoia
Especie: Sequoia sempervirens Endl.
Imagen principal del árbol: Descarga la imagen del árbol

Descripción

Este árbol es conocido vulgarmente como Secuoya, al igual que otras especies como Sequoiadendron giganteum o Metasequoia glyptostroboides. Su nombre científico es Sequoia sempervirens, pero también  podemos encontrar referencias de ella como Taxodium sempervirens.

 

Es la conífera más alta que existe, pudiendo alcanzar los 115m de altura con unos 4 – 6 m de diámetro de tronco en la base.

Origen

Es originaria  de la costa del Pacífico, desde el suroeste de Oregón hasta la región de la bahía de Monterrey en California. Fue introducida en Europa a través de Rusia en 1843.

Etimología

El primer europeo que descubrió esta conífera fue el misionero franciscano español Juan Crespí, quien en 1769 denominó a estos árboles palos colorados (los americanos los llaman actualmente redwood).

 

La descripción científica la hizo en 1824 el botánico inglés Aymler Lambert, de la Sociedad Lineana. El filólogo húngaro Stephen Endlicher lo denominó Sequoia en honor de un jefe cherokee notable, de nombre Secuoyah o Sikwayi, quien publicó grafismos que permitieron interpretar el idioma de esos indios. Curiosamente este indio jamás vio una secuoya. La denominación específica sempervirens, «siempre verde» en latín, hace referencia a que las hojas son perennes. El nombre común procede de como se la conoce en su lugar de origen.

Características morfológicas

Porte

La copa al principio es cónica y regular, de follaje denso; después se ensancha y se hace irregular, con cierta forma columnar.

Raíces

El sistema radical es superficial con numerosas raíces extendidas.

Tronco

El tronco es recto y fuerte. Tiene la corteza  fibrosa y esponjosa, de color marrón rojizo y gruesa, de hasta 30 cm de espesor en los ejemplares viejos, profundamente estriada con largos filamentos que se desprenden dejando al descubierto madera rojiza.  En la base del tronco aparecen brotes muy vigorosos, lo que no es muy frecuente entre las coníferas.

Ramas

La ramificación es alterna, con ramas descendentes que suelen extenderse, incluso muy próximas al suelo. Los brotes son bifurcados, irregularmente ramificados y de color verde al principio para volverse marrones con el tiempo.

Yemas

Las yemas son muy pequeñas y están rodeadas de escamas.

Hojas

Las hojas son perennes, de dos tipos: las del ápice y el extremo de las ramas son escuamiformes y están apretadas contra el tallo, mientras que las hojas de las ramas laterales son lineares y puntiagudas de 1 a 3 cm de longitud. Son verde oscuras por el haz y presentan dos bandas blanquecinas por el envés. Están insertas en la ramilla en espiral pero se disponen formando planos en las que parecen estar en posición dística (se giran para formar planos y aprovechar la luz mejor). Son aplanadas y rígidas y al cabo de 3 o 4 años se desprenden las ramillas.

Flores

Las inflorescencias masculinas son ovoides y escamosas, de color amarillo o pardo, miden de 2 a 6 mm de longitud, salen solitarias y se disponen en situación lateral o terminal, en las puntas de las ramillas.

 

Las femeninas son terminales, aproximadamente del mismo tamaño que las masculinas, de color verde y salen en las ramas superiores.

 

La floración es a mediados o finales de invierno, a veces hasta principios de la primavera.

Frutos

Los estróbilos (piñas) son globosos, pedunculados y colgantes, y aparecen dispuestos al final de las ramillas. Miden alrededor de 2-2,5 cm de diámetro y presentan una veintena de escamas leñosas dispuestas en espiral y arrugadas, que se abren durante la madurez. Por cada escama hay entre 2 y 5 piñones elípsoideos provistos de dos alas esponjosas.

 

Aunque cada árbol puede llegar a tener millones de semillas, solamente son viables entre el 15 o 20%. La maduración es anual, produciéndose en otoño, pasando de muy verde a color marrón.

Requerimientos ambientales

Suelo

Soporta los suelos calizos, pero no los salinos. Prefiere suelos profundos y húmedos, dónde pueda desarrollarse mejor. Requiere bastante espacio disponible para adquirir un buen desarrollo, debido a su gran tamaño.

Clima

Requiere clima húmedo o templado, pudiendo soportar inviernos rigurosos. La altitud idónea se encuentra entre los 0 y los 900 m sobre el nivel del mar, pero por otro lado tiene resistencia media al viento.

 

Prefiere las regiones húmedas de mucha neblina y lluvias abundantes. Requiere pleno sol, tolerando cierta sombra.

 

Soporta la segunda línea de mar y la contaminación urbana, pero no la industrial. Es sensible a las heladas primaverales.

Características agronómicas

Multiplicación

Se reproduce bien por semillas sin necesidad de tratamiento previo, aunque muchas no resultan viables. En el entorno de la base aparecen brotes de cepa y raíz, pudiéndose también multiplicar a partir de ellos. Por otro lado el trasplante es difícil y debe realizarse en invierno.

Poda

Admite poda y topiaria. Sin embargo no requiere grandes podas, solamente podas de limpieza y mantenimiento que ayuden al árbol a desarrollar su forma natural.

Crecimiento y longevidad

Algunos ejemplares de secuoyas notables han sobrepasado los 3000 años de edad y mantienen un volumen de madera de más de 2.000 metros cúbicos. Son verdaderos monumentos naturales, que han sido la base para la declaración de algunos Parques Nacionales en los lugares donde se encuentran.

 

El crecimiento es rápido al principio, si las condiciones son adecuadas, después puede considerarse de crecimiento más lento.  La longevidad es milenaria, a menudo sobrepasando los 600 años con facilidad.

Plagas y enfermedades

Se considera resistente a plagas y enfermedades. En ocasiones puede verse atacada pero no suele presentar problemas serios.

Usos

La madera es blanda, rojiza y fácil de trabajar y duradera en contacto con el suelo, ya que tarda en pudrirse. Ha sido empleada en construcción, para traviesas y postes.

 

Actualmente su aprovechamiento está muy limitado, ya que la mayor parte de sus poblaciones se encuentran dentro de espacios naturales protegidos.

 

Se usa como ornamental, existiendo diversos cultivares de jardinería,  algunos de porte menor. En alguna ocasión se usa como arbusto, con fuertes podas, pero es un árbol que destaca en jardines grandes, con espacio para lucir su enorme porte de árbol singular.

Historia y curiosidades

Esta especie es una reliquia viviente de la Era Terciaria y está considerado como el árbol gigante del mundo vegetal. Al sur de San Francisco existe un ejemplar de esta secuoya que tiene 112 m de altura, con casi 5 m de diámetro del tronco en la base.

 

Se encuentran en algunos parques de Madrid, destacando los ejemplares del Parque del Retiro y del Palacio de la Moncloa.

 

En Tajamar hay un ejemplar  próximo al Nogal, cerca de la zona del burrito.

Bibliografía

A. López Lillo, A. López Santalla: “Árboles madrileños” (2007, Obra Social Caja Madrid).

 

José Francisco Ballester-Olmos y Anguís. “Árboles y arbustos de los jardines de Valencia.” (Ayuntamiento de Valencia).

 

 

 

 

Copyright © 2024 Senda Botánica de Tajamar - Los árboles del Colegio Tajamar.